PARRILLA MULTIMEDIA
juan
carmona
¿Por qué te planteaste sacarte la licencia de drones?
ÁLVARO
HERNÁNDEZ
¿Cómo ha sido la introducción de drones en el mundo de la comunicación?
¿Crees que es necesario sacársela o se puede manejar un dron sin necesidad de obtenerla?
¿Cuáles son las posibilidades reales de hacer periodismo con drones?
¿Qué duración y precio medio tiene el curso? ¿Merece la pena sacárselo?
¿Qué información que has recibido a lo largo del curso ha sido la más útil?
¿Con esta licencia puedes manejar cualquier tipo de dron?
¿Puedes manejar el dron donde quieras o existen espacios limitados? ¿qué opinas sobre ello?
¿Se han convertido estos en una herramienta periodística fundamental?
¿Nos encontramos ante una nueva era de hacer periodismo? ¿Se suma esa práctica al ya utilizado Periodismo 2.0?
¿Son necesarias las restricciones en cuanto a la utilización de los aparatos (en relación al espacio aéreo y las licencias)?
¿Necesitarán los medios de comunicación secciones especializadas en el uso periodístico de los drones?
Te planteas utilizar el dron con otra finalidad que no sea ocio personal? ¿Algún interés en el ámbito periodístico?
MARÍA ÁNGELES FERNÁNDEZ
¿Cómo ha sido la introducción de drones en el mundo de la comunicación?
¿Cuáles son las posibilidades reales de hacer periodismo con drones?
¿Como profesora considera necesaria la formación en cuanto a drones?
¿Necesitarán los medios de comunicación secciones especializadas en el uso periodístico de los drones?
¿Son necesarias las restricciones en cuanto a la utilización de los aparatos (en relación al espacio aéreo y las licencias)?
JORGE BARRENO
¿Cómo ha sido la introducción de drones en el mundo de la comunicación?
La introducción de los drones en el ámbito civil es todavía incipiente, más si cabe en el mundo de la comunicación. Aunque la tecnología se está desarrollando muy rápidamente, y las capacidades informativas de estos aparatos son infinitas, las restricciones legales están ocasionando que el uso de drones con fines periodísticos se circunscriba a ámbitos muy específicos, principalmente relacionados con la toma estética de novedosos planos aéreos.
Autores como M.ª Ángeles Fernández Barrero opinan que algunas de las circunstancias que frenan el desarrollo de los drones para su incorporación a las rutinas periodísticas son el coste que supone para los medios una inversión en una tecnología con una alta siniestralidad, la escasa durabilidad y constante modernización, la complejidad técnica y administrativa que implica su uso, la escasez de periodistas especializados o las limitaciones de una legislación restrictiva.
Todo ello hace que la introducción de los drones en el mundo de la comunicación esté siendo muy lenta y se limite principalmente a la obtención de recursos gráficos en espacios rurales.
¿Cuáles son las posibilidades reales de hacer periodismo con drones?
En teoría, las posibilidades de hacer periodismo con drones son prácticamente ilimitadas. Entre otras cosas, permiten la obtención de imágenes aéreas de difícil cobertura con un importante abaratamiento de costes, nuevas perspectivas, rapidez y movilidad y muchas más seguridad para los periodistas.
Así mismo, en el ámbito de las comunicaciones, este tipo de aparatos han revolucionado la manera de recabar información gracias a la instalación de todo tipo de sensores. Gracias a ellos, y programando aplicaciones específicas, podremos revolucionar campos como el periodismo de datos o el periodismo de investigación.
La variedad e importancia de las aplicaciones potenciales, y el incremento en las inversiones y avances en los últimos años, hace razonable prever un rápido progreso en un futuro cercano, aunque profundamente mermado debido a las restricciones legales. Las estrictas normas que, por ejemplo, impiden su vuelo con finalidad comercial en núcleos urbanos, limitan claramente las posibilidades reales de hacer periodismo con drones de una forma legal.
¿Se han convertido estos en una herramienta periodística fundamental?
Los drones ya son una herramienta periodística fundamental. Los vehículos aéreos no tripulados permiten tomar imágenes y coberturas antes impensables. Su bajo coste y rapidez para volar ha hecho que, por ejemplo, supla al helicóptero a la hora de tomar imágenes aéreas, accediendo a sitios hasta hace poco inalcanzables.
No debemos pasar por alto la rentabilidad y eficiencia que tiene el uso de drones en la comunicación audiovisual. Gracias la plataforma estabilizadora que incorporan basada en una suspensión en los tres ejes tipo cardan (llamada gimbal) donde podemos acoplar nuestra cámara, nos permite una estabilización en su movimiento para conservar toda la calidad de las tomas desde cualquier altura y a cualquier ángulo.
Entre otras finalidades, los drones se usan para grabar deportes en movimiento, secuencias de acción, reportajes, publicidad, vídeos corporativos, grabaciones en directo, en guerras o para temas medioambientales
¿Nos encontramos ante una nueva era de hacer periodismo? ¿Se suma esa práctica al ya utilizado Periodismo 2.0?
Sin duda alguna nos encontramos ante una nueva forma de hacer periodismo. Gracias a la miniaturización de la tecnología, a los estabilizadores y a la utilización de cámaras de alta resolución en los drones, el periodista puede obtener un punto de vista útil jamás mostrado, de una manera sencilla y barata.
Cualquier periodista, o ciudadano, puede llevar un dron en su mochila y participar en el proceso de creación y difusión de la información. Con cualquier dron actual se pueden retransmitir imágenes y vídeo en directo, tanto en las redes sociales, como en los medios digitales y en los entornos colaborativos. Gracias a todas estas herramientas los ciudadanos convertirse en protagonistas de la creación y distribución de contenidos.
Esta democratización del periodismo y de la información convierte al ciudadano en protagonista de la creación y distribución de contenidos y supone un nuevo paradigma en el mundo periodístico. Debido a ello los ciudadanos-periodistas adquieren una gran independencia respecto a los medios de comunicación y, por primera vez en la historia del Periodismo, son capaces de generar noticias que marquen la agenda informativa.
¿Necesitarán los medios de comunicación secciones especializadas en el uso periodístico de los drones?
Estoy convencido de que, una vez se superen los problemas legales en nuestro país, los medios de comunicación españoles contarán con secciones especializadas en el uso periodístico de los drones.
En agosto de 2016 la cadena de televisión estadounidense CNN lanzaba, junto con Turner Broadcasting y Time Warner, el proyecto ‘CNN AIR’, una flota de drones controlada por dos periodistas operadores de vuelo para captar imágenes aéreas y desarrollar noticias llevadas a cabo con drones. Con este nuevo departamento, la cadena de televisión estadounidense pretendía añadir valor a la producción y la narración de las noticias.
La CNN fue la primera cadena de televisión en incorporar esta tecnología a sus operaciones. Con la ayuda del Instituto de Investigación tecnológica de Georgia (GTRI) consiguió un permiso especial de la Administración de Aviación Federal (FAA) para hacer de los drones un sistema seguro y legal de recopilación de noticias.
¿Son necesarias las restricciones en cuanto a la utilización de los aparatos (en relación al espacio aéreo y las licencias)?
La organización administrativa de la atmósfera es diferente a la organización administrativa de la superficie terrestre. El ministerio de Fomento, mediante la Agencia Estatal de Seguridad Aérea (AESA) – y en algunos casos el de Defensa – son las únicas autoridades competentes a la hora de volar drones.
Está claro que la caída de drones sobre la vía pública puede ser un problema debido a su peso y a la fuerza de impacto en la caída de objetos. Más peligro son los vehículos de 2.000 kilogramos que circulan por las carreteras o los patinetes eléctricos, escasamente regulados, que se reproducen por nuestras ciudades como setas.
En mi opinión, las restricciones impuestas por AESA en cuanto a la utilización de drones son excesivas. Con el transcurso de los años, y a pasos agigantados, las empresas que construyen estos aparatos voladores están desarrollando múltiples sistemas de emergencia y precaución para que no se estrellen. Algunos son; gps, altímetro, módulo de retorno a casa, sensores ultrasónicos, cámaras de vídeo antichoque e incluso la instalación de paracaídas.
Perder hoy un dron es mucho más difícil que hace tres años. Además estos aparatos pesan menos y son cada vez más potentes. No parece lógico que AESA se empeñe en restringir el uso de drones que pesan 300 gramos mediante normas y licencias complejas y tasas abultadas mientras los patinetes de varios kilogramos de peso circulan a sus anchas por las aceras a 30 kilómetros por hora. Deberían, por lo menos, existir profesiones, como la de periodista, en las que los estados no restringieran tan severamente el uso de estas herramientas voladoras y fuera posible obtener licencias especiales menos costosas y burocráticamente inaccesibles.